MORIR EN SAMARCANDA
de ÁNGELES NAVARRO PEIRO
Seis personajes, profesores de universidad, autores de los cuentos, a los que, a través de sus diálogos y pensamientos, el lector irá conociendo y armando sus historias. Todos pertenecen a un departamento imaginario, ideado para situarlos en la Facultad de Filología de la Universidad Complutense de Madrid: el departamento de Literatura Medieval Comparada. Ellos son especialistas en literatura medieval, árabe y hebrea, tanto en al-Andalus como en los reinos cristianos de la península ibérica. De ese modo no se alude a ningún departamento que exista o haya existido en la realidad y los profesores protagonistas son totalmente ficticios. También aparece otro personaje, algo enigmático, que es el guardés de la casa donde se refugian, el cual los acoge y los atiende, pero sobre todo los escucha y los observa.
Al terminar cada cuento, los profesores conversan sobre lo que les ha sugerido el texto. No se trata de sesudos y académicos comentarios, sino de expresar las ideas que en ese momento les vienen a la cabeza. Puede que el relato les haga pensar en un recurso literario, en una determinada película, en la obra de un escritor, incluso en una canción. Como en cualquier reunión distendida, cuya finalidad es el puro entretenimiento, surgen todo tipo de temas, que no llegan a desarrollarse, porque durante la charla se interrumpen unos a otros y se plantean nuevas cuestiones, aunque lo que predomina en las conversaciones, como era de esperar, son diversos aspectos y características de la literatura medieval. Por otra parte, el guardés, a petición propia, también escucha las narraciones y hace preguntas sobre lo que no entiende. En estos casos, sí pueden aparecer algunas respuestas de tipo más didáctico para aclararle las dudas.
Interesante ¿Verdad? Puede reservar ejemplares de la obra que verá la luz próximamente.
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